El modelo holístico de desarrollo infantil y juvenil de Compassion sigue el ciclo de vida de un niño. Ninguna etapa de desarrollo es más importante que otra, y todas las áreas de desarrollo holístico son necesarias para que los niños a los que servimos salgan de la pobreza en nombre de Jesús.

Empezamos lo más temprano en la vida del niño para terminar bien. El modelo empieza desde antes del nacimiento del niño con atención prenatal a las madres y se extiende hasta que los jóvenes hayan completado con éxito las actividades de los ministerios del modelo.

El programa implica una dedicación a los niños en forma individual e integral, como su énfasis en la sociedad con la iglesia y el proceso de facilitación. Se considera e implementa una programación que es apropiada para el desarrollo (edad) de cada etapa de la vida de un niño. Para Compassion, la programación apropiada para su edad significa una programación de alto impacto: la programación que capta la atención del niño, lo mantiene comprometido, fomenta el desarrollo y el aprendizaje holístico en todas las áreas del holismo y promueve el logro de resultados, lo que hace que el niño tenga éxito en el futuro.

 

 

Motivamos a los niños a adquirir conocimientos que se constituyan en herramientas válidas para resolver conflictos en las diferentes etapas de su vida.

 

 

Capacitamos y brindamos salud preventiva y curativa, mediante chequeos médicos y atención en casos especiales de salud.

A través de este componente el niño es estimulado a desarrollar su personalidad, identidad y autonomía. Además, procuramos afianzar su relación con otros y con la comunidad.

 

 

Presentamos el evangelio al niño y su familia, y los animamos a aceptar a Cristo como su Salvador personal. Además, le enseñamos a vivir de acuerdo con principios bíblicos y a asumir responsabilidades en su iglesia local.